Alguien dice tu nombre de Luis García Montero.

El libro tiene un ambiente muy agradable, en realidad podemos sentir ese ambiente de verano cargado, esos paseos por la ciudad a altas horas de la noche en una temperatura ideal. compartimos el pensamiento del protagonista y nos encontramos en vueltos en el día a día de una existencia normal de los años 70.

Con "Alguien dice tu nombre" viajamos no sólo en el espacio hasta Granada, sino en el tiempo hasta esa época de la post-guerra.

Un libro impregnado de alguna manera de cierta nostalgia, pero es muy agradable y ligero en el leer. Eso sí, las primeras diez páginas son laaargas, lentas y pesadas. De hehco yo lo dejé de lado en una primera ocasión en la página ocho porque me aburrió. Pero luego regresé a la lectura y la verdad, no me arrepiento.

Frases que me han gustado del libro:

*Repite que él no sabe leer, pero que la vida tampoco es una novela, que las muertes, las palizas y las detenciones son de verdad.

*La diferencia principal entre un piso de estudiantes y una casa propiamente dicha reside en la levedad o la pesadez de los objetos.

*En dos días me han llamado con gracia maricón y gilipollas.

*La vergüenza es una sal marina muy corrosiva que no se quita con una ducha. Dura meses, años.

*El deseo ajeno conmueve más que el propio, se hace nuestro con más fuerza para envolvernos en un torbellino.

*Lo que a mí se me perdonaría como una locura de juventud, a ella le puede destrozar la vida. Ésa es la realidad en la que vivimos.

*Las canciones son otra forma de complicidad.

*Así es la vida, se tiene hambre de muchas cosas, la realidad es una máquina de exigir. Pide alimentos, amor, sexo, gloria, sabiduría, información. Sólo los muertos tienen cubiertas sus necesidades.

*Me chupé tres años, una batalla detrás de otra, y ahora me levanto todos los días para servir el desayuno al vecindario. Los enfermeros de la Casa de Socorro, bienvenidos. Los empleados del Granada Club de Fútbol, bienvenidos. Los funcionarios del Ayuntamiento, bienvenidos, café con leche y media tostada para todos.

*Los pueblos pequeños, además de motes, tienen un farmacéutico, un médico, un alcalde, un cabo de la Guardia Civil, una modista, un cura y un rojo oficial.

*El amor sincero no es incompatible ni con las tentaciones de la carne, ni con el poder de convicción de los amigos.

* Impresionado por la maldición de Marcelo, he comprendido la necesidad de ser prudente con mis obsesiones y mis sentimientos. La ciudad, el piso, mi habitación y mis libros han dejado de parecerme una cárcel. Mejor no provocar a la fortuna.

*Todo eso sí, pero con celos, porque la vida es una contradicción y los sentimientos no están sometidos a la coherencia.

*Cuando uno cambia de vida, los recuerdos de la época anterior pueden confundirse con una situación pegajosa de desgana.

*Un plato preferido es un acto de acuerdo con la vida y de reconocimiento propio. No hace falta más para sentirse satisfecho con el mundo por una hora.

*El pudor es la forma más digna de negociar con el miedo.

*Quien siembra simpatía, cosecha favores.

Esta es mi favorita:
*Uno aprende a mantener conversaciones íntimas en la cama. Uno aprende también que es posible hacer el amor con tristeza, como si cada abrazo fuese una pérdida, y cada beso una intuición de alejamiento, y cada caricia una despedida, y unas sábanas el andén de una estación. El deseo no está sometido sólo a la alegría, su hermana natural. Llega a entenderse con otros sentimientos como la desorientación, el miedo, la melancolía y la amargura.

*Se tarda tiempo en encontrar la razón de algunas tristezas. La vida no es directa ni va nunca por un solo camino.
 

*No sé quién escribió eso de que un hombre tiene la edad de la mujer a la que abraza.
Comentario personal: Yo tampoco, pero es un bestia. Entiéndanlo bien señores, estar con una mujer veinte años más joven NO los hace veinte años más jóvenes.